EDUCACIÓN FINANCIERA PARA ALUMNOS DE INSTITUTO NACIONAL DE SAN FRANCISCO GOTERA MORAZÁN

La Tarjeta de Crédito es originada por una Línea de Crédito otorgada por una entidad. No es una extensión de sus ingresos.

Así inició el taller financiero sobre “Uso de tarjetas de créditos, entendiendo los cobros de los bancos, tasas, comisiones y recargos”, dirigidos a los estudiantes de tercer año contador del Instituto Nacional 14 de Julio de San Francisco Gotera, Morazán.

El taller financiero fue desarrollado por Ítalo Ferrufino y Julio Enrique Canales, ambos estudiantes de la Universidad Dr. José Matías Delgado y Pasantes de la Superintendencia del Sistema Financiero (SSF), quienes realizan sus horas sociales.

“La tarjeta de Crédito no debe utilizarse para adquirir artículos a largo plazo, para financiar la canasta básica y de preferencia no utilizarla para retirar efectivo”, recomendaron a los estudiantes que en un futuro podrían adquirir el producto. Su uso es amplio porque representa un medio de pago muy práctico en el que sin traer consigo efectivo se puede pagar en una gran cantidad de establecimientos afiliados, hacer compras vía internet o por teléfono, disponer de efectivo en cajeros automáticos, pagar servicios básicos como energía eléctrica, agua y otros como telefonía celular ó cable; realizar reservaciones, destacaron los Facilitadores de la capacitación.

Según el artículo 2 de la Ley del Sistema de Tarjetas de Crédito, “la tarjeta de crédito es un medio o documento privado, firmado nominativo e intransferible, resultante de un contrato de apertura de crédito que permite al titular o tarjetahabiente utilizarlo como medio de pago para adquirir bienes y servicios en comercios o instituciones afiliadas o retirar dinero en efectivo en instituciones financieras y en dispensadores autorizados por el emisor”.

La tarjeta de crédito surgió en 1949, fruto de una combinación de casualidades en un Restaurante de Nueva York, el creador es Frank X. McNamara, de la “Hamilton Credit Corporation”.

Diners Club fue la primera tarjeta de crédito y tuvo poca repercusión en 14 restaurantes neoyorquinos. Al inicio de 1950 solo 200 personas la poseían y al final del mismo año más de 20,000 personas la utilizaban y el número de establecimientos afiliados crecía. En el año 2000, más de US$ 1,800,000 millones en productos y servicios fueron comprados. En total fueron 70 alumnos los capacitados en el tema mencionado.

San Salvador, 27 de mayo de 2019.